Organizar tu boda no es una tarea sencilla. Independientemente de que contrates o no a un especialista, tendrás siempre la última palabra en cuanto a tu imagen, es decir, peinado, vestido, maquillaje y, por supuesto, complementos y accesorios. En estos últimos entran los pendientes de boda ideales para acompañar el estilo que quieras llevar al evento.
Pendientes según tu vestido de novia
La primera regla es no mezclar pendientes modernos con vestidos de estilo vintage. Todo debe tener cierta cordura.
La segunda regla básica es que tus pendientes tengan el mismo tono que tu vestido de boda. Por ejemplo, elige el oro blanco para pendientes si el vestido que utilizarás es blanco puro. Puedes combinarlos con diamantes o circonitas, que elevan su luminosidad al cien por ciento. Si usas una tonalidad cálida, unos de oro son la mejor opción.
Los pendientes no deben combinar únicamente con el vestido, sino con sus complementos, como un collar, tiara o cualquier otro accesorio.
¿Y según el escote?
Con los hombros descubiertos, los pendientes largos son ideales. Con tirantes finos y escote en V, por ejemplo, largos o cortos son opciones. Si son anchos los tirantes, unos de botón pueden ser los idóneos. Si el escote es cerrado, los pequeños de botón o cortos serán la solución ideal.
Según otros factores
– Peinado: con pelo suelto, los pendientes largos serán ideales. Para semirrecogido y recogidos, cualquier tipo de pendiente hará que te veas muy bien, aunque también dependerá del resto de detalles.
– Estilo de la boda: para las clásicas, las perlas o diamantes de tamaño corto serán la solución. En las vintage, los pendientes deben seguir el estilo general. En las rústicas, utiliza pendientes de efecto envejecido, y en las alejadas de lo clásico, no utilices perlas.
Elegir los pendientes de boda ideales no es sencillo. Ten en cuenta algunos factores para que estos sean un éxito.